Las contradicciones en las que incurrieron la madre y el padrastro del niño Yosimar Paolo, hallado sin vida en una cueva de Huasicancha, habría sido fundamental para que la policía sospechara de la culpabilidad de ambos. La hermana mayor de 8 años del pequeño, fue pieza clave en la investigación.
Cerca de las 11 de la noche de ayer, la policía capturó a la madre Nery Vanessa Poma Lázaro (27) y al padrastro Luis Felipe Humanlazo Sandoval (28) por presuntamente ser los asesinos del pequeño Yosimar. Al ser cuestionada, la mujer solo respondió: “Yo no lo maté”, mientras que Luis Huamanlazo no reconoció culpa alguna.
La hermana mayor de Yosimar, de iniciales E. P. P. (8) le habría contado a su abuela materna que Luis Huamanlazo se llevó a Yosimar a una choza para que no se mojara con la lluvia, pero desde ese día el menor no apareció.
El padre de Yosimar, Wilson Wilfredo Guzmán, refirió que los vecinos de su hijo, le habrían mencionado que el padrastro le propinaba golpes y diversos maltratos como hacerlo dormir con el perro o dejarlo en la calle, siendo esto de conocimiento de la madre. “Yo pedí la custodia total, pero Nery me lo negó”, se lamentó.
Hasta las instalaciones de la Divincri, en Millotingo, también llegó la abuela materna del menor, quien entre lágrimas exigía justicia. “El día de la desaparición de mi nieto, mi hija estaba rara, se encontraba mal, y cuando le preguntamos por Yosimar, ella solo dijo que no sabía que había pasado con él”, indicó.
