En sesión extraordinaria, el Concejo Municipal de El Tambo aprobó la vacancia del alcalde distrital, Julio César Llallico Colca, tras establecer su presunta responsabilidad en el delito de nepotismo y contratación irregular de personal. La decisión se tomó con ocho votos a favor y cuatro en contra.
La moción de vacancia fue presentada por el primer regidor, Iván Medina Esquivel, y contó con el apoyo de sus colegas como los concejales Emilio Flores Poma, Alejandra Espejo Mendoza, Marco Coz Herquinio, José García Terrazos, Daniel Campos Acosta, Anaisa Ventura Paitán, y Percy Núñez Siguel. Mientras los regidores que votaron en contra son Jenny Adrés Livia, Estela Auris Rojas y Luis López Bastidas, junto con el alcalde Llallico.
ARGUMENTOS DE VACANCIA
Durante la sesión, la defensa del alcalde sustentó que el vínculo familiar cuestionado, referente a Eslider Alexander Guidotti Llallico, no constituía nepotismo, ya que se encontraba en el octavo grado de consanguinidad, lo cual no se considera causal de vacancia según la Ley Orgánica de Municipalidades.
Asimismo, señaló que Luz Esthefani Ramos Flores, esposa de Guidotti Llallico no guardaba afinidad con la autoridad edil por lo cual no se podría incurrir en nepotismo y pedir su vacancia. “Voy a demostrar en los fueros que correspondan que toda mi conducta fue transparente y sin transgresión a la ley”, declaró tras la votación.
VINCULO FAMILIAR
Sin embargo, el abogado del teniente alcalde explico que el alcalde Llallico favoreció la contratación de su sobrina, esposa de Eslider Alexander Guidotti Llallico, para un puesto en la MDT como Ingeniero V a pesar de no cumplir con los requisitos mínimos de experiencia (cuatro años) exigidos en la convocatoria pública y que al momento de su contratación, solo contaba con un año y cuatro meses de experiencia. Su contrato fue posteriormente prorrogado en cinco ocasiones.
Asimismo, mostró las actas de nacimiento, certificados de inscripción, acta de matrimonio, el curriculum vitae de Ramos Flores en donde el alcalde registra como padrino de boda de su sobrino cinco meses antes de la contratación.
El alcalde Llallico defendió su posición señalando que su participación en el matrimonio de la pareja fue solo como testigo y no debía considerarse una falta. Cuestionó el proceso alegando que no se le permitió presentar un memorando con mayores elementos de descargo. “Voy a demostrar en los fueros que correspondan que toda mi conducta fue transparente y sin transgresión a la ley”, declaró tras la votación.
La decisión del Concejo Municipal generó una fuerte reacción entre los simpatizantes del alcalde, quienes se congregaron en las afueras de la municipalidad para expresar su respaldo y rechazo a la postura de los regidores de oposición.Este caso será derivado en los próximos días al Jurado Nacional de Elecciones (JNE), instancia que definirá si el burgomaestre permanece o sale del cargo.
