Por: Pedro Ricce
Los ministerios claves ya fueron entregados a los oligopolios corruptos (dueños del Perú) y a algunas mafias organizadas dentro de los paraguas de partidos políticos.
El premierato está en manos de Alicorp, Repsol y Telefónica. Alberto Otárola Peñaranda, fue abogado de los sindicatos amarillos creados para aniquilar los reclamos justos de los trabajadores. REPSOL, la deudora histórica más grande por destruir el clima a escala global y también responsable de provocar el peor ecocidio en el mar de Grau (dejando a 1500 pescadores arrojados en la miseria en Ancón) y, TELEFÓNICA, que en la actualidad debe aún 3 mil millones de soles al estado peruano, ambas están salvadas de las amenazas de Castillo. Además del premierato, al Grupo Romero se le entregó el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo, como dijo Dionicio Romero Paoletti al “mejor gerente que tuvimos”: Luis Fernando Helguero González.
A Graña y Montero y sus corruptos socios también les tocó dos ministerios: a) el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, la ministra Hania Pérez de Cuellar Lubienska, es exesposa del gerente de inversiones de Odebrech Ramesh Agrawal y gerente general de Prime Capital Advisors (de la que también es accionista la ministra), su empresa realizó las estructuras financieras de los proyectos: Gasoducto Sur Peruano, Irrigación Olmos, Chavimochic, Petrolera UNNA de Graña y Montero y muchos más, todos procesados por corruptos; y b) Graña y Montero se aseguró colocando en el Ministerio de Transportes y Comunicaciones a Paola Pierina Lazarte Castillo, una de sus accionistas más importantes, así protegerán las coimas multimillonarias que pagaron para apropiarse de las licitaciones del Gasoducto Sur Peruano, la Carretera IIRSA Norte, la Vía Expresa Sur de Lima, la Línea 1 del Metro de Lima y la Carretera IIRSA Sur, tramos 2 y 3, y obras viales de conexión en Cusco, Ayacucho, Ica, Abancay y Arequipa.
A los banqueros y al Grupo Comercio, el Ministerio de la Producción. La ministra Sandra Belaunde Arnillas, fue gerente de Estudios Económicos de la Asociación de Bancos del Perú – ASBANC, organización que representa a las instituciones financieras privadas del Perú y columnista (con jugosísimo sueldo) del Grupo Comercio.
Para asegurar las inversiones mineras entregó el Ministerio de Energía y Minas a Óscar Vera Gargurevich, suspendido de PetroPerú por faltas disciplinarias e irregularidades en gestión de gastos sociales y de mantenimiento; quien lo primero que hizo como ministro – en plena convulsión social – fue reunirse con Jaime Fernández-Cuesta Luca de Tena, director ejecutivo de REPSOL, supuestamente para fortalecer el subsector de hidrocarburos, sin duda no los del estado peruano.
A las mafias camufladas en el APRA les tocó el Ministerio de Educación, el aprista Oscar Manuel Becerra Tresierra, quien compró 846 000 laptops con una sobrevaloración de 41 millones de soles, por lo que fue expulsado del Ministerio de Educación y sometido a un proceso administrativo, pero como de costumbre limpiado por sus compañeros.
A los narcofujimontesinistas, el tan ansiado Ministerio del Interior. Vicente Romero Fernández, el lacayo repartidor de propaganda del corrupto-criminal-dictador Alberto Fujimori. Así se entiende como 7 jóvenes policías son abandonados a su suerte y asesinados en camionetas Amarok VW de 40 mil dólares, mientras que en Lima miles de policías salen a violar los derechos humanos usan blindados Pegaso 3560 BMR que cuestan 265 mil dólares, que serían realmente útiles en el VRAEM, pero claro a sus socios los narcos no los tocan.
Para el Grupo Brescia Dina Boluarte ha separado el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, colocando a Julio Javier Demartini Montes, un pobre monigote obediente. El Grupo Brescia hace tiempo se apropió del MIDIS a golpe de regalos de conservas, para que no le quiten las licencias que le dieron los Jueces Cuellos Blancos del Callao, desde que la dictadora era ministra.
Finalmente, el Ministerio de Economía y Finanzas al ministro del statu quo, para que todo permanezca como está y a nadie se le ocurra soñar algún cambio. Con Alex Alonso Contreras Miranda – como dijo su madrina – “todo estará estable”, prueba fehaciente, que las especulaciones en la economía peruana no tuvieron nada que ver con el gobierno de Castillo, el preso político.
Hay aún otros ministerios que están camuflando descaradamente sus entreguismos a nivel de viceministerios y direcciones.
La Sra. Boluarte probablemente no renuncie hasta el 2026, la protegerán para no perder los ministerios, y el Congreso no hará nada porque le conviene seguir usufructuando de sus lobbies.
