Como primera actividad pública tras su retorno a la gobernación regional de Junín, Fernando Orihuela Rojas, hoy inspeccionó la construcción de la I.E. Mariscal Castilla del distrito de El Tambo, obra regional con múltiples observaciones en su ejecución que ha merecido varias protestas de la comunidad educativa exigiendo su culminación ante la falta de aulas de contingencia.
Desde sus inicios, esta obra estuvo envuelta en escándalos: 4 licitaciones que tuvo que afrontar desde la gestión de Vladimir Cerrón, la alerta que la Contraloría General hizo del intento de pago irregular de 10 millones a la empresa constructora, y la vinculación con la empresa China Civil Engineering Construction Corporation, acusada por la colaboradora Karelim López de haber recibido obras direccionadas por parte de “Los Niños” de Acción Popular.
Además, el mes pasado, estudiantes y padres de familia intentaron tomar la sede regional denunciando retrasos tanto en la implementación de módulos prefabricados, como en la construcción de su centro educativo.
Sin embargo, Fernando Orihuela aseguró que la obra no está retrasada y que por el contrario, con el 35% de avance que se tiene, están por encima de lo programado, afirmación que no encaja con las múltiples ampliaciones de plazo que ha tenido la construcción.
OBRA CON RETRASOS
Sobre la implementación de las aulas prefabricadas, Orihuela señaló que ya retomaron el proyecto, rebatiendo lo dicho por la gestión anterior a cargo de Clever Mercado Méndez, de que los módulos ya no serían implementados porque se iban a culminar al mismo tiempo que la infraestructura del colegio.
La directora (e) de la I.E. Mariscal Castilla, Carolina Iparraguirre Córdova, y el presidente de la Asociación de Padres de Familia, Pedro Miguel Medina, que también estuvieron presentes en la inspección, pidieron que la obra no vuelva a paralizarse y se mantenga el compromiso de continuar con las inspecciones presenciales. Respecto al problema de los alquileres afirmaron que ya fue solucionado por el Gobierno Regional.
El reintegrado gerente regional de Infraestructura, Ánthony Ávila Escalante, aseguró que la implementación de módulos prefabricados culminarían en octubre de este año y que la construcción del colegio estaría lista para enero del 2023.
Al consultar al gobernador regional sobre si valía la pena el presupuesto invertido para solo 3 meses de uso de los ambientes prefabricados, señaló que el proyecto es uno solo, por lo cual la implementación se debe dar sí o sí y que estos podrían ser usados para futuros proyectos. Finalmente, Orihuela no se animó a dar su palabra de que la construcción culminaría en enero, y solo declaró esquivamente: “Estamos en ese proceso”.
Hoy, la parte afectada fue representada por 2 estudiantes castillistas que asistieron a la inspección y expresaron sus deseos de que la obra sea culminada en enero del 2023, para que sus más de 3 mil compañeros retornen a la institución de la cual fueron retirados en julio del año pasado.
