Tras la detención del vigilante Armando Piñas Piscco (46) por el presunto delito de reglaje a funcionarios del Gobierno Regional de Junín (GRJ), Jhon Pineda Salas, vocero de Sierra y Selva Contigo Junín (SSCJ) negó que el partido haya orquestado el seguimiento y aseguró no conocer al detenido, sin embargo, este tenía múltiples fotos con Zósimo Cárdenas en su celular e incluso carnets que lo acreditaban como integrante del Comando Regional partidario.
“Esta persona no tiene absolutamente ningún vínculo con SSCJ, ni menos con el economista Zósimo Cárdenas que está concentrado en su agenda para asumir la gestión” declaro Pineda Salas a Infoandes mientras en la sede del GRJ se realizaban diligencias por la presunta sustracción de documentos por miembros de Fernando Orihuela.
El excandidato al congreso además calificó todo este asunto de presunto reglaje como “un artilugio de la gestión saliente” y añadió que presume que el detenido fue contratado por el mismo Fernando Orihuela con el fin victimizarse. Esto a pesar el acusado tenía dos carnets de SSCJ, uno como integrante del Comando Regional y otro de la Base Distrital el Tambo que respalda a Julio Llallico, el alcalde electo.
Respectos a las fotos con el electo gobernador regional, Zósimo Cárdenas, Pineda minimizó el hecho señalando que “muchos tienen fotos con el economista”. Sobre cómo se enteraron de que un día antes funcionarios de Perú Libre pretendían trasladar archivadores, añadió que simplemente pasaba por ahí.
Contradicciones
Desacreditando a su vocero y respaldando algunas de las declaraciones del detenido, Roy Gonzales, excandidato a la alcaldía provincial de Jauja por SSCJ y responsable del Comité de Transferencia de la nueva gestión, reconoció que Piñas Piscco, aunque no figura como militante, era un miembro activo del partido.
“Con estas actitudes que de noche se siguen retirando documentos, nosotros por el bien de la institución había personas que estaban haciendo la vigilancia de la forma exterior […] Los hermanos del movimiento por propia voluntad han realizado una jornada de vigilancia” refirió a través de una emisora radial local repitiendo que no era reglaje, sino simple vigilancia.
Finalmente, ya sea por la cantidad abrumadora de pruebas o porque le costaba sostener sus argumentos plagados de contradicciones, Jhon Pineda Salas, confesó en exteriores de la Divincri que su movimiento tenía conocimiento de las actividades de Armando Piñas Piscco.
“Filmar o grabar en espacio público no constituye delito, él está detenido de manera arbitraria por orden del señor Fernando Orihuela […] exigimos su inmediata liberación porque nosotros lo pusimos para la vigilancia y no es un reglaje […] porque alertamos que están sacando documentos y hay dos sacos que los documentos están rotos en pedazos”, admitió.
El caso fue derivado a la Sexta Fiscalía Provincial Penal Corporativa de la fiscal, Elvira Montoya Cueto, quien prefirió no detallar la investigación y solo mencionó que el caso se investiga por presunto delito de reglaje.
