En lo que va del año, al menos siete mujeres trans han sido asesinadas en el Perú, cifra que ha preocupado a organizaciones como Amnistía Internacional. Huancayo no es indiferente a estas cifras, por lo que la comunidad LGTBQ+ exigirá el respeto a sus derechos bajo el lema “queremos vivir y no sobrevivir”, en la marcha de este 28 de junio, fecha en la que se conmemora el Día Internacional del Orgullo.
“Esperamos que los asesinatos se detengan, pero es importante saber que esto es consecuencia de la exclusión de la sociedad que no da oportunidades laborales dignas a las mujeres trans. Muchas de ellas, incluso, no terminan de estudiar y eso las llevan como trabajadoras sexuales”, dijo Jhoan Huayuyo Garay, representante de la comunidad respecto a los crímenes de odio registrados en el país.
Huayuyo Garay lamentó que el mismo Gobierno no lleve una cifra específica y transparente respecto a mujeres trans asesinadas, lo que conlleva a un silencio y fortalece la impunidad frente a estos casos que también se presentan bajo la figura de agresiones físicas y verbales. “Las autoridades deben acompañar a estas víctimas para que alcancen la justicia”, exigió.
A nivel provincial, la comunidad LGTBQ+ insta a las autoridades a generar mesas de trabajo conjuntas y al cumplimiento de ordenanzas municipales como la 365 que se implementó hace más de cinco años y que hacía referencia a la no discriminación por la orientación sexual e identidad de género, la misma que, consideran, no se respeta en lo absoluto y que se puede ver reflejada en la mínima y casi nula presencia de mujeres trans en puestos laborales en municipios.
“Pedimos igualdad de derechos para la población, que por años ha sido invisibilizada, queremos que el Estado nos proteja como todo peruana y peruano. A nivel nacional, regional y local no dan leyes que nos defiendan. Nos siguen matando y no hay leyes no hay justicia para nosotras”, demandó Bélgica Ledesma, presidenta de la comunidad en Huancayo.
La dirigente resaltó que hay muchos prejuicios que la población aún mantiene razón por las cuales a pesar de tener grados académicos no las contratan lo que las frustra. “Pedimos a las autoridades que nos inviten a formar mesas de trabajo para debatir estos temas”, solicitó.
Según una encuesta del INEI citada por Amnistía Internacional dirigida a las personas LGTBI en Perú, el 63% declaró haber sido víctima de algún tipo de violencia y discriminación, principalmente en espacios públicos y educativos. Además, el 56,5% señaló que tenía miedo de expresar su orientación sexual y/o identidad de género debido a la agresión o discriminación.