Mediante un pronunciamiento extenso la Central Asháninka de Río Ene (CARE) exigió la inmediata intervención del Ministerio de Justicia y Derechos Huamanos, tras la orden de detención preliminar de su líder, Ángel Pedro Valerio, involucrado en las investigaciones por la desaparición de 4 personas durante las protestas por el asesinato del líder Santiago Contoricón, en Puerto Ocopa en abril pasado.
La organización indígena lamentó esta medida al no haber citado previamente a Pedro Valerio para declarar o esclarecer los hechos materia de investigación, por lo que no se podría hablar de una intencionalidad de evadir a la justicia, debido a que el líder asháninka nunca fue notificado y recién se enteró de los hechos tras la detención del líder Fabián Antúnez Camacho, presidente de la Central Asháninka de Río Tambo (CART).
La CARE expresó que Ángel Pedro Valerio no tuvo ninguna participación directa ni indirecta en la desaparición de estas cuatro personas, pues en la fecha donde se reportó las desapariciones, el defensor ambiental, se encontraba en la comunidad nativa de Sampintiari, ubicada a más de 10 horas de Puerto Ocopa, lugar donde se desarrolló el bloqueo de vías que exigía la presencia de los ministros de Estado.
Solo este último lunes, el líder Fabián Antúnez Camacho y José Saavedra, jefe de la comunidad de Puerto Ocopa fueron detenidos y las oficinas de esta organización fueron allanadas en torno a las investigaciones por los presuntos delitos de secuestro y homicidio calificado en contra José Valdivia Andamayo (32), Brandom Cruz Rojas (19), Adrián Asunción Ramírez Fernández (51) y Erick Cabrera Cáceres (43), desaparecidos en abril de este año.
Por su parte, la Central de Comunidades Nativas de Selva Central, liderada por Teddy Sinacay Tomás, hizo un llamado de calma a los pueblos indígenas y pidió que las autoridades respeten los derechos de los pueblos indígenas y se garantice el respeto al debido proceso. “Hacemos un llamado a la comunidad internacional y a las autoridades competentes para que se comprometan con la resolución pacífica de los conflictos”, se lee en el comunicado emitido.
Por otro lado, la CARE rechazó que las autoridades hayan actuado de forma rápida para solicitar la detención de líderes de organizaciones indígenas que combaten el narcotráfico a solas y el tráfico de tierras, contrario al accionar que realizan para proteger el derecho de los pueblos indígenas que han denunciado amenazas durante muchos años sin encontrar resultados.
