En un operativo realizado por la Dirección Regional de Salud (DIRESA) junto a la Policía constataron que una conocida clínica no contaba con la autorización para brindar servicios de salud. Sin embargo, en el interior se encontró a 12 personas que esperaban ser atendidas.
La Diresa, la Policía Nacional del Perú y la Segunda fiscalía provincial y Prevención del Delito, intervinieron la clínica “Tovar” ubicada en avenida Leandra Torres N.º 407 en San Carlos, donde atendía diversos servicios de salud especializados a puerta cerrada.
En el establecimiento se halló a personal de salud laborando, pacientes sacando cita y algunos siendo atendidos, pese a que el local no contaba con la presencia del director médico, ni el responsable legal para realizar dichas atenciones medicas.
La Fiscalía, inició un procedimiento preventivo donde se corroboro que el establecimiento no tenía autorización para ofertar servicios de salud en el Registro Nacional, ni tampoco categorización vigente para brindar servicios especializados.
El coronel de la VI Macropol, Sim Galván, informó que “se intervino la clínica Tovar y en su interior se encontró 12 personas que esperan recibir el servicios de gastroenterología y algunos servicios especializados, pero la fiscal corroboró que no tiene autorización para brindar este tipo de servicio, es por eso que la Municipalidad Provincial de Huancayo procedió a clausurarlo”
